
Respiración Alternada
SUKHA – PURVAK
La tradición oriental señala una red de canales energéticos por los cuales circula la energía vital: los Nadis. Quizá se puedan relacionar con las diferentes ramificaciones nerviosas del cuerpo humano. Algunos especialistas los comparan con los meridianos de la acupuntura. Entre otros, encontramos tres Nadis de importancia:
- Ida: correspondiente a la fosa nasal izquierda; su característica es lunar, femenina, negativa...
- Pingala: relacionada con la fosa derecha, solar, masculina, positivo.
- Shushumna: símbolo de energía ascendente, corresponde a la espina dorsal y canaliza las energías de Ida y Pingala.
Se puede definir como la unión simbólica del sol y la luna, la armonización creadora de la vida...
Por la ventana nasal izquierda entra el Prana lunar.
Por la derecha, el Prana solar.
La energía vital que se asimila por los Nadis a través de unos transformadores y acumuladores de energía del cuerpo sutil o energético que se relacionan directamente con la columna vertebral y se denominan Chakras. Una vez más, los estudiosos del tema buscan la similitud en el cuerpo físico, y en este caso, dicen que estos centros bioenergéticos se corresponden con los plexos nerviosos, las glándulas endocrinas y el sistema nervioso cerebro-espinal.
Práctica
En una sesión de Yoga se ejercita este Pranayama durante diez minutos.
Beneficios
Produce una notable limpieza de las fosas nasales, la garganta y una estupenda sensación de "cabeza despejada".
Aprendizaje
Se toma consciencia del esquema corporal y de su lateralidad mediante una atención táctil-respiratoria.
Simbolismo
Posiblemente sea uno de los Pranayamas de mayor simbolismo. Es un hecho constante en el estudio de culturas
antiguas encontrar la oposición de dos mundos, el positivo y el negativo, representados por los colores blanco
y negro como luminosidad polarizada o como una mutación dual.
En este Pranayama se observa el concepto de la
Kundalini representada por la imagen de una serpiente (la fuerza sutil) enrollada sobre sí misma en la columna
vertebral (coxis). Los especialistas del Hatha Yoga afirman que la práctica de las posturas corporales y los
ejercicios respiratorios, permite que esta serpiente simbólica despierte y suba a través de los centros de
energía (Chakras) situados a lo largo de la espina dorsal hasta llegar al vértice superior de la cabeza
denominado Sahasrara o la 'flor del Loto de mil pétalos' que al abrirse recibe la luz del cielo. La Shakti;
la ascensión o el descenso de la fuerza de vida.
Desarrollo
Postura inicial

En la posición de sentado, piernas cruzadas, columna vertebral recta.
Se sube la mano derecha a la altura de la nariz y se colocan los dedos índice y pulgar apoyados en las ventanas nasales, sin taparlas.
La otra mano, se pone en la rodilla izquierda, con la palma hacia arriba y el dedo pulgar e índice tocándose para formar un pequeño círculo: 'el Gesto de la Sabiduría'.
Hay personas que prefieren colocar la mano izquierda de otra manera, también es apropiado.
Durante la práctica de la respiración alternada se tapara una u otra ventana nasal. Es importante que en la presión del dedo que tapa la aleta de la nariz sea suave, sin apretar demasiado los orificios para que la nariz no se desvíe de una manera exagerada hacia uno u otro lado.
Descripción del Pranayama
- Se exhala el aire por ambas fosas nasales.
- Se tapa la ventana derecha de la nariz, comprimiéndola, ligeramente, con el dedo pulgar. Se inhala, profundamente, por la ventanilla izquierda.
- Cuando finaliza la inspiración, también se tapa la ventana izquierda con el dedo índice y se retiene el aire, dos o tres segundos, con ambas ventanillas obturadas.
- Finalizado ese tiempo, se levanta el dedo pulgar de la ventana derecha y se espira, por la misma, silenciosamente.
- Sin pausa, se inhala por la ventanilla derecha.
- Se cierran, nuevamente, ambas fosas nasales, se retiene dos o tres segundos el aire.
- Ahora, se destapa la ventana izquierda levantando el dedo índice y se exhala, lentamente, siempre por la nariz.
Y, de esta manera, se repite el ciclo respiratorio, sucesivamente, no pasando más de unas 10 repeticiones.
Cuando surge el cansancio por tener el brazo en alto o se cumple el número de repeticiones indicado, entonces se vuelve a la postura inicial, se practica un breve relax y se abandona el ejercicio.
En todo momento la respiración es serena y natural.